Como iluminar la cocina de tu casa
Debido a su papel como el centro más funcional de la casa y a las condiciones particulares relacionadas con el uso de líquidos, electrodomésticos y trabajo manual, la cocina necesita una iluminación más intensa y brillante. Un nivel adecuado de luz no solo facilita las tareas diarias, como cocinar y limpiar, sino que también mejora la seguridad al reducir el riesgo de accidentes.
En cuanto a los tonos de luz recomendables para una cocina, puedes elegir entre tonos cálidos (2700-3000K) o tonos blanco neutro (4000-4500K), según el ambiente que desees crear. Los tonos cálidos proporcionan una atmósfera acogedora y relajante, ideal para áreas como el rincón del desayuno o el comedor. Por otro lado, los tonos de luz más blancos ofrecen una iluminación más clara y energética, perfecta para las zonas de trabajo.
Si tienes dudas sobre cuál elegir, aquí te explicamos qué es la temperatura de color de la luz y cómo influye en la iluminación de tu cocina..
En una cocina, podemos diferenciar varios tipos de iluminación: la luz general, la luz de trabajo o tarea, y la luz decorativa. La combinación de estos tipos de iluminación es clave para lograr versatilidad y comodidad en el espacio. Es importante tener en cuenta que no se necesita el mismo tipo de luz para todas las actividades; por ejemplo, la iluminación para desayunar o cenar puede ser más suave y acogedora, mientras que la luz para cocinar debe ser más intensa y enfocada para facilitar las tareas.
Ajustar la iluminación según el uso específico de cada área garantiza un ambiente funcional y agradable.
Para la iluminación general, es crucial priorizar la eficiencia energética, ya que es una de las áreas que más tiempo permanece encendida en una casa. En la actualidad, los plafones de cocina son una opción altamente recomendables debido a su alto nivel de iluminación y facilidad de limpieza.
Si buscamos una opción más integrada en la decoración y aún más limpia, los focos o downlights LED son la alternativa perfecta
Estas soluciones ofrecen una luz amplia y uniforme, ideal para mantener la cocina bien iluminada de manera eficiente y conveniente. Buscaremos que nos ilumine la mayor superficie posible de la cocina evitando deslumbramientos y zonas oscuras.
La iluminación de trabajo o tarea está ubicada normalmente en la zona de la encimera o meseta, es donde se realizan trabajos más precisos y cuidadosos por lo que es muy importante tener buen nivel de luz.
Se pueden instalar tiras LED en los bajos de los muebles, ya que proporcionan una iluminación uniforme en toda la superficie de la encimera, eliminando zonas de sombra y creando una luz continua.
La iluminación decorativa de la cocina puede incluir la instalación de una o varias lámparas de cocina, que actúan como elementos estéticos en la zona de la mesa, ideal para desayunos, comidas y charlas. Estas lámparas pueden utilizar bombillas LED, y se recomienda optar por un tono de luz cálida, entre 2700 y 3000K, para crear un ambiente más acogedor y agradable.
En resumen, una iluminación bien planificada puede transformar tu cocina en un espacio funcional y acogedor. Combina luces generales, de tarea y decorativas para crear un ambiente perfecto.